El 20 de febrero de 2024, el ministro de Economía, Juan Carlos Vega Malo, remitió la Proforma presupuestaria 2024 a la Asamblea Nacional. Esta proyección contempla un presupuesto de $35.536 millones, con un pronóstico de PIB nominal de $121.710 millones y un crecimiento económico del 0,8%.
Destacando un enfoque en áreas prioritarias, se asigna un aumento significativo para seguridad, salud y educación, alcanzando $3.519 millones para el Gabinete de Seguridad, $4.491 millones para el Sistema Nacional de Salud, y $4.641 millones para educación básica y bachillerato.
A pesar de esto, los ingresos totales de $24.039 millones contrastan con los gastos de $28.848 millones, generando un déficit de $4.809 millones. Aunque se proyecta un gasto menor en teoría, la reducción específica no está clara, especialmente con el mantenimiento de asignaciones para seguridad social y bonos.
El Ministerio de Economía señala que la Proforma no incorpora nuevos ingresos destinados a abordar el conflicto armado y la crisis económica, pendientes de la publicación de la normativa en el Registro Oficial. Esta actualización del Presupuesto General del Estado promete más recursos para seguridad y un aumento en las asignaciones a gobiernos autónomos descentralizados.
Sin embargo, persisten interrogantes sobre el ajuste del gasto público, el financiamiento para cubrir el déficit y los atrasos, así como el origen de los recursos para el Plan Anual de Inversiones de $1.734 millones, destinado a diversos proyectos de infraestructura.
El Ministerio de Economía se comprometió a proporcionar detalles adicionales sobre el Presupuesto General del Estado, dejando pendientes temas como la gestión de los subsidios a los combustibles y el pago de atrasos acumulados desde 2023. Aunque las proyecciones económicas parecen optimistas, las necesidades de financiamiento podrían superar las estimaciones actuales, según expertos independientes.