El Salmo 34:15 nos dice que los ojos del Señor están sobre los justos, y sus oídos, atentos a sus oraciones. Este versículo nos da un gran consuelo y esperanza. Nos recuerda que Dios está siempre con nosotros, observando nuestras acciones y escuchando nuestras oraciones.

La palabra «justos» en este versículo se refiere a aquellos que viven de acuerdo con la voluntad de Dios. Esto significa que son personas honestas, compasivas y que buscan hacer el bien. Cuando vivimos de esta manera, podemos estar seguros de que Dios está de nuestro lado.

Dios está atento a nuestras oraciones, incluso cuando nos sentimos perdidos o solos. Él siempre está dispuesto a escucharnos y a ayudarnos. Cuando oramos, podemos expresarle nuestras necesidades, nuestras preocupaciones y nuestros sueños. Podemos pedirle que nos guíe, que nos fortalezca y que nos dé paz.

Este versículo nos anima a vivir una vida justa y a orar con confianza a Dios. Cuando hacemos esto, podemos experimentar su amor y su protección en nuestra vida.

Creo que este versículo es un recordatorio importante para todos nosotros. Nos anima a vivir una vida justa y a orar con confianza a Dios. Cuando hacemos esto, podemos experimentar su amor y su protección en nuestra vida.

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