Lo que menos trabajo exige del ojo es mirar a lo lejos (más de 50 metros) sin concentrar la visión en ningún punto fijo. Sin embargo, el estilo de vida moderno exige fijar la mirada durante muchas horas diarias en objetos muy cercanos, como los libros o los ordenadores. Esto hace que los ojos se fatiguen y debiliten, lo que favorece la progresión de los defectos de visión.
Los ejercicios oculares que aquí presentamos, pueden compensar la fatiga ocular y, según algunos, frenar la evolución de los defectos de visión como la miopía, la presbicia (vista cansada) y el astigmatismo.
En cada sesión de ejercicios para mejorar la vista, pueden hacerse uno, varios o todos los que se indican. Se recomienda comenzar siempre con el lavado ocular, y terminar con el reposo ocular.
Lavado Ocular
Lavar los párpados con agua templada durante unos 10 segundos, y a continuación, con agua fría durante otros 10 segundos. Repetir varias veces. Este ejercicio es el ideal para comenzar la sesión.
Cambio de foco
Sostener dos objetos a diferentes distancias, uno con cada mano. Fijar la vista en uno, y después de parpadear durante unos segundos, fijarla en el otro. Repetir al menos diez veces seguidas.
Ejercicio con varilla
Mover la cabeza a uno y otro lado de una varilla, manteniendo los ojos fijos en ella. Hacerlo durante dos o tres minutos.
Balanceo
Estando de pie, fijar la vista en un objeto estático. Balancear el cuerpo sin apartar la mirada del objeto elegido y sin dejar de parpadear. Repetir al menos diez veces.
Masaje de los ojos
Practicado con suavidad, tanto por uno mismo como por un masajista, el masaje ocular complementa al resto de ejercicios.
Pintar con los ojos
Observar un objeto a media distancia, como un árbol o un coche, y seguir su contorno con los ojos sin mover la cabeza.
Gimnasia ocular
Mover el ojo en todas las direcciones, describiendo un círculo. Repetirlo tres o cuatro veces seguidas.
Masaje lagrimal
Las yemas de los dedos pasan por el párpado inferior, desde la sien hacia la nariz. Este ejercicio facilita el vaciamiento de las lágrimas por el canal lacrimal, que está situado en la cara interna o nasal del ojo.
Se recomienda en caso de dacriocistitis (inflamación del lacrimal) y de ojos llorosos. Cuando existen bolsas palpebrales, este ejercicio favorece su reabsorción.
Parpadeos rápidos
Mientras que se mantiene la vista fija en un objeto lejano, parpadear rápidamente durante uno o dos minutos.
