Las operadoras móviles en Ecuador han señalado que, a pesar de los esfuerzos para mantener la continuidad de sus servicios mediante el uso de fuentes de energía alterna, baterías y generadores, los cortes prolongados de energía, que se extenderán hasta ocho horas diarias, superan su capacidad de respuesta. Los planes de contingencia de estas empresas están diseñados para afrontar interrupciones de entre dos y tres horas, por lo que advierten sobre posibles intermitencias y fallas en las comunicaciones durante los apagones.
Ante esta situación, el Ministerio de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información (Mintel) ha solicitado a la Agencia de Regulación y Control de las Telecomunicaciones (Arcotel) que supervise y regule los planes de contingencia de los prestadores de servicios de telecomunicaciones. El objetivo es garantizar que se tomen las acciones necesarias para mantener la operatividad de las redes y mitigar cualquier interrupción en los servicios, considerados esenciales para la ciudadanía.
El Gobierno, liderado por Daniel Noboa, ha manifestado que las entidades del régimen general de telecomunicaciones continuarán monitoreando la situación y colaborando con las operadoras para minimizar el impacto en el servicio a nivel nacional. Esto cobra especial relevancia en la semana del 23 al 27 de septiembre, cuando los apagones programados de ocho horas diarias, entre las 22:00 y las 06:00, afectarán la infraestructura de telecomunicaciones.
Los gremios empresariales del sector, como la Asociación de Empresas Proveedoras de Servicios de Internet, la Asociación Nacional de Proveedores de Internet y la Asociación de Empresas de Telecomunicaciones (Asetel), han advertido que, aunque se han desplegado medidas extraordinarias, las suspensiones prolongadas superan las capacidades actuales de los equipos de respaldo. Estos dispositivos, diseñados para mantener el servicio por un tiempo limitado, no cuentan con el tiempo necesario para recargarse por completo, lo que podría generar interrupciones en la telefonía móvil e Internet fijo después de las primeras tres horas de corte eléctrico.
Además, el uso intensivo de datos móviles durante los apagones incrementa el tráfico en las redes, lo que provoca problemas adicionales de conexión y acelera el consumo de batería en los dispositivos móviles.
Las operadoras y el gobierno continuarán trabajando de manera conjunta para mitigar el impacto en los usuarios, quienes podrían enfrentar inconvenientes en su acceso a estos servicios esenciales.